El cambio climático supone un riesgo importante para la economía y el sector financiero, incluido el sector de los seguros. No solo aumentan las amenazas físicas a las que están expuestas las aseguradoras. Además, las compañías tienen que gestionar su exposición a las inversiones en activos y sectores más vulnerables a los riesgos físicos y de transición.
Según desvela el ‘Informe sobre el Mercado Mundial de Seguros’ de la Asociación Internacional de Supervisores de Seguros (IAIS), los activos ‘relevantes para el clima’ representan más del 35% de las carteras de inversión de las aseguradoras a nivel global,. Principalmente se concentran en los sectores de la vivienda y la energía.
“El cambio climático es el reto que define a esta generación”, indica Vicky Saporta, presidenta del Comité Ejecutivo de la IAIS. «Los resultados de este informe ponen de manifiesto las ventajas de llevar a cabo una transición ordenada hacia los objetivos climáticos acordados internacionalmente para minimizar los riesgos para la solvencia y la estabilidad financiera”, apunta.
IAIS considera que, teniendo en cuenta la sólida posición general de solvencia del Seguro mundial, el sector en su conjunto parece ser capaz de absorber las pérdidas de inversión de todos los escenarios probados.