La autoridad italiana de Competencia ha advertido de los pactos parasociales y los cruces accionariales entre las empresas del sector financiero italiano, que alcanzan un nivel de interrelación que no tiene comparación en Europa. Según la información que hoy publica Expansión, un informe del citado organismo revela que más de un 60% de las empresas cotizadas, y en particular los bancos y aseguradoras del país, cuentan con accionistas que son sus directos competidores. El porcentaje sube al 89,2% si se consideran los integrantes de los órganos de dirección.
Antonio Catricalá, presidente del órgano de Competencia, señala que si el sector no se autorregula, será el propio organismo el que “necesitará intervenir con algunos instrumentos normativos o regulatorios”. Advierte sobre el riesgo del ‘efecto dominó’, dada la inestabilidad económica y financiera actual, que puede llevar a que un accionista en dificultades repercuta y arrastre directamente a sus competidores.